Gimnasia logró reponerse de la dura goleada sufrida en Mendoza e iguala anoche 0 a 0 frente a Vélez. Los dirigidos por Gorosito mantienen el invicto en como locales.
Quizá el contexto no le dio el valor que merece, pero Gimnasia pudo salir adelante de lo que fue la dolorosa goleada sufrida ante el Tomba y empató ante un durísimo Vélez en condición de local.
La imagen de la primera parte no fue buena, el Lobo se mostraba impreciso, incapaz de mantener la pelota o generar triangulaciones entre el Pulga, Alemán o Carbonero. Ello sumado a la presión alta propuesta por los dirigidos por Pellegrino hacía todo cuesta arriba para el Mens Sana. Pero las figuras de Rodrigo Rey y Leo Morales le devolvieron al equipo la firmeza y confianza necesaria para hacer pie.
En el cierre de la primera etapa lo tuvo tras una serie de rebotes en el área rival, que ni el Yacaré, ni Ramírez, ni Contín pudieron capitalizar en gol. Minutos previo al cierre, la ventaja pudo llegar tras un buen centro del Pulga que Ramírez cabeceó en el área chica, pero la pelota se fue pocos centímetros por arriba del travesaño.
Ya en el complemento la imagen fue otra, si bien los de Liniers tuvieron sus ocasiones perfectamente contenidas por Rey y acrecentaron la figura de Morales en defensa. Gorosito tomó la iniciativa de adelantar a Alemán y el equipo se paró con un claro 4-1-3-2. Tal es así que el uruguayo tuvo un par de oportunidades desde afuera del área, pero la fortuna no le sonrió.
Es cierto que al equipo le urge mejorar, pero Gimnasia logró sumar un punto que tiene otro sabor debido a la jerarquía de un rival altamente superior, que venía de una dolorosa goleada en contra y que en un buen complemento pudo notarse la mano de Gorosito. Ahora el objetivo es claro, aprovechar la doble localía y volver al triunfo el próximo lunes ante Unión.