A pesar de varios rumores, Gimnasia tomó la decisión de poner paños fríos y desestimar los intereses locales que hay por Benjamín Domínguez e Ignacio Miramón.
Ya desde el año pasado son bastantes los chicos del Lobo que empezaron a llamar la atención de diferentes equipos pero hay dos nombres en particular que en base a su gran rendimiento y presente, comienzan a ser vistos por equipos de nuestro país y también del exterior. Tanto Ignacio Miramón como Benjamín Domínguez son seguidos de cerca pero la Comisión Directiva albiazul tomó la decisión de que al menos hasta junio no se juntarán a charlar con ningún club y menos del fútbol argentino, ya que la idea es intentar venderlo al extranjero como así también en suma cercana a los 10 millones de dólares.
En la previa al clásico y tras la confirmación de la lesión en los ligamentos cruzados para Johan Carbonero, desde Racing comenzaron a sondear a Gimnasia por Domínguez, quien encima en el partido contra Estudiantes fue una de las figuras, junto a Miramón y Alan Lescano. Sin embargo, ya desde el primer contacto la respuesta desde calle 4 fue negativa y hasta se les ofreció otros nombres de ataque pero nunca se pensó la idea de que el categoría 2003 se vaya durante la competencia y encima al mercado local.
Con la intención de que los chicos sigan dando los pasos correspondientes en Primera y enfocarse en lo deportivo, en la previa al comienzo de la Copa Sudamericana, en el Tripero quieren poner paños fríos a esta situación y esperar hasta los próximos mercados de pases para ver que opción podría ser la mejor. De esta manera, con los primeros empujones por parte de Néstor Gorosito y ahora el apoyo total por Sebastián Romero, la cantera de Gimnasia empieza a pisar fuerte para ya transformarse en una realidad y siendo después de mucho tiempo una gran camada que pueda darle resultados y también buena economía al Mens Sana.