Volvió a ser

Fútbol Fútbol profesional

Enorme triunfo, táctico y futbolísitico, de Gimnasia que se impuso en el cierre de la fecha 11 de la Copa de la Liga por 2 a 1 a Newell’s en el Bosque. Johan Carbonero y Matías Pérez García fueron los goleadores de la noche.

Cuándo más hay que sacar pecho, cuándo más cuesta arriba es el camino. Allí es cuando el Lobo saca las garras. Y pareciera que esta es la esencia de Gimnasia, que tuvo toda una semana de trabajo para recuperar la identidad que el brote de Covid-19 le quitó injustamente. Y ante un rival duro, que venía en alza se reencontró con la victoria en un cotejo que lo llevó a la reinvención táctica.

La lesión de Cecchini, obligó a la dupla a plantear una falsa línea de 5 que por momentos fue de 3. A soltar a Weigandt y Melluso al ataque y devolverle la titularidad (y la cinta) a un caudillo cómo Coronel.

Los problemas de siempre, la mala definición, la falta de una referencia fija en el área. Se lo perdió Ramírez en el inicio y 3 minutos más tarde Ayala metió un excelso pase en profundidad para Carbonero que definió mal e hizo lucir a Alan Aguerre. Todo fue de Gimnasia, la tenencia, los desbordes, las situaciones e incluso la firmeza en el fondo. Maxi Coronel regresaba activo, aplomado y se acoplaba bien a Morales y Guiffrey, dándole libertades a los laterales.

En el segundo tiempo llegaría el esperado desahogo. A los 8 minutos, Pérez García con un tiro libre rápido y Eric Ramírez,asistencia mediante, encontraron el hueco para que Carbonero desparrame a los rivales y cayéndose, mientras le cometían penal terminó elevando con el taco la pelota que cruzó la línea del arco para que el Lobo gritase el primero.

Ingresó Cocimano por Ramírez y tuve de entrada el 2 a 0 producto de un desborde fenomenal de Marcelo Weigandt, pero Aguerre se volvió a lucir. Sin embargo a los 22 minutos Gimnasia logró definir el triunfo, enorme jugada colectiva que inició en un desborde del Chelo, asistencia atrás para Pérez García (de buen partido) y remate inatajable para serenar al equipo. Poco duraría, ya que en la única desatención del fondo, Cingolani pondría el descuento parcial.

Pero los dirigidos por la dupla supieron resistir, no rompieron el esquema, salvo Miranda, los que ingresaron desde el banco se acoplaron y fue más el Lobo quién estuvo cerca de liquidar el partido con el tercero, que Newell’s el que apuntó al empate.

Final sufrido, pero victoria para Gimnasia que fue más, engrosa el promedio y se puso a 3 puntos de la zona de clasificación, con 6 en juego. “Mientras hay vida, hay esperanza”, siempre rezó el sabio maestro Griguol. ¡Qué así sea Lobo!