Gimnasia jugó su mejor partido en la Copa Diego Maradona y venció a Colón por 2 a 0 con goles de Marcelo Weigandt y Nicolás Contín. Los dirigidos por Martini y Messera son líderes del Grupo B de la Zona Complementación.
Gimnasia comenzó con el pie derecho su participación en la Zona Campeonato de la Copa Diego Armando Maradona. Visitaba a un entonado Colón, equipo que la prensa daba como favorito producto de sus 13 puntos obtenidos en la fase de grupos, pero los dirigidos por Martini y Messera con la certeza de su estilo, la conciencia de sus virtudes futbolísticas y el corazón en la mano logró un importante triunfo en el Cementerio de los elefantes.
De principio a fin el Lobo fue más, fue quién supo encontrar los espacios que dejaba el rival, el juego vertical propuesto por Weigandt, Ramírez y García eran las armas principales del conjunto albiazul, que poco a poco llamaba a la acción a Burián. Contín por su parte se mosrtraba activo, se asociaba a la perfección con los volantes a la hora de pasar al ataque.
Fue justamente a los 30 minutos, donde luego de un pase en profundidad de García, que derivó en un fino penal que Delfino no llegó a ver sobre Ramírez, que Gimnasia encontró la ventaja. Tiro libre precisamente ejectuado por Ayala en el borde del área, Burián dio rebote y Weigandt oficiando de centro delantero más que lateral la encontró y se llenó la boca de gol. Logrando adelantar al Mens Sana y concretar su primer gol en primera.
Colón creció, pero la solidez defensiva del tripero le permitió a los dirigidos por la dupla irse al entretiempo 1 a 0 en ventaja.
En el complemento se vio la mejor cara del equipo. Intratable, sólido, en minutos se encargó de desechar las ilusiones sabaleras de llegar a la igualdad. Exactamente a los 2 minutos de la segunda parte García hizo estragos por izquierda, jugó con Contín, que tras un enorme pivoteo sobre la humanidad de Olivera, dejó en ridículo al arquero Burián luego de gambetearlo y con el arco vacío a su merced puso al Lobo 2 a 0 arriba.
Minutos después Ramírez tuvo el 3 a 0 pero insólitamente no estuvo fino para definir pese a que el golero rival se mostraba vencido. Tanto García, como Alemán se ocuparon de encontrar los huecos que el Sabalero dejaba en su afán de encontrar el descuento. Así las cosas, Gimnasia siempre fue más y justificó una más que merecida victoria, que le permite soñar. Y en grande.