En Estancia Chica y con el orden invertido, la Novena abrió el telón. Al minuto de juego, Areco puso el 1-0 final. Y como Boca volvió a perder, ahora el líder es Lanús. El Lobo, un punto abajo y todavía debiendo enfrentarlo. Luego, la Octava se despachó con una goleada fantástica: atendió 4-1 a los albirrojos, con goles de Ancherogguon, Greco, Benítez y Álvarez. Gran reacción del equipo de Banfi, que comenzó perdiendo y lo dio vuelta. La 2004 disputó tres clásicos en juveniles y aún no perdió.
La fiesta en Abasto la cerró la Séptima. Ivo Mammini abrió el marcador, la visita lo igualó y Gonzalo González, cuando se moría el partido, sentenció el 2-1 final por intermedio de la pelota parada. Victoria agónica, locura desatada y una mínima ilusión encendida. Los de Roselli-Maida aún no renuncian al torneo.
En el Country, la jornada arrancó mal: la Sexta no hizo pie y fue derrotada 2-0. A su término, la Quinta de Lobos igualó sin goles. Manganelli tapó un penal y después el Mens Sana no pudo concretar un triunfo que mereció. Empate que no sirve para escalar. Por último, la Cuarta hizo el gasto pero pagó una mala primera parte y perdió 2-1. Barros Schelotto, el tanto del descuento.
Así pasó una nueva edición del clásico platense y el saldo fue favorable a Gimnasia, que se impuso con tres victorias y un empate. Como positivo, el invicto de nueve puntos por parte de las categorías menores. Además, la confirmación de lo que se preveía: el Lobo mejoró considerablemente sus filas y lo ha demostrado. Hoy, otra vez. Se viene San Martín: las mayores serán locales, mientras que las menores viajarán a Tucumán.
Por Lautaro Pérez – @laautaroperez