LAMENTABLEMENTE, EL CLÁSICO YA EMPEZÓ

Fútbol Opinión

Estudiantes, a través de su Presidente Juan Sebastián Verón, realizó el pedido para utilizar el Estadio del Bosque en la Fecha 6 ante Central y encendió la mecha. La dirigencia pincharrata, de manera desafortunada, decidió que “el clásico” se empiece a jugar antes de tiempo. OPINIÓN.

El domingo, desde las 16 horas, la bola rodará una vez más en el Juan Carmelo Zerillo y marcará el inicio de un nuevo clásico platense. Eso, futbolísticamente hablando. Lamentablemente, el clásico pareciera haber empezado, y aunque suene descabellado, el puntapié inicial lo dio Juan Sebastián Verón.

Debido a los problemas de localia que Estudiantes de La Plata viene sufriendo hace ya más de 10 años, y ante la imposibilidad de utilizar el Estadio Ciudad de La Plata para recibir a Rosario Central en la Fecha 6, la Brujita firmó una nota dirigida a su par albiazul Daniel Onofri para solicitarle los servicios de 60 y 118. La misma nunca fue presentada en la Sede mens sana de calle 4, pero en horas de la mañana se viralizó por las distintas redes sociales, mientras el máximo dirigente albirrojo brindaba una entrevista televisiva de alcance nacional, donde también daba a conocer su intención de recibir al Canalla en la casa del Lobo. De esta manera, el tema ya estaba instalado.

Aquí es cuando uno se pregunta: ¿Había necesidad de hacerlo en la previa al clásico cuando aún faltan más de 15 días para la hipotética localia del Pincha en El Bosque? Y no, no había necesidad. No la había si lo que se buscaba realmente era que Estudiantes no salga de La Plata para recibir a Central. Ahora, ¿Realmente se busca eso o sólo se intenta embarrar la cancha y enaltecer la figura propia ante la opinión pública? Me inclino por ésto último.

Los dirigentes deben ser hinchas de la institución que representan, les da un plus. Pero no deben ser hinchas jugando a ser dirigentes. Cuidado ahí. Verón, con este acto, nuevamente tropezó con la pasión que le genera la entidad pincharrata; pasión que ha quedado demostrada en infinidad de oportunidades a lo largo de su exitosa carrera como jugador. ¿Por qué? Porque el máximo mandamás del Pincha sabe muy bien que éste no era el camino indicado. Ésto se podría haber solucionado por privado como se ha hecho en otras oportunidades, sin ir más lejos. Y aquí es cuando vuelvo a la verdadera razón de ese “pedido”: el posicionamiento y la actitud ejemplar ante la opinión pública. Algo que no desemboca en otra cosa que cruces entre hinchas del Lobo y del León.

No vamos a ser mal pensados y creer que este deseo de jugar en El Bosque tiene algo que ver con el décimo aniversario de aquel fatídico derby disputado en 25 y 32, no. Pero es inevitable pensar en que se realizó sabiendo la repercusión que iba a tener en la gente. En otras palabras, encendieron el fuego de una previa que venía transitando una paz envidiable. No estamos en tiempos donde agregar leña al fuego sea lo conveniente. Las comisiones directivas, de ambos clubes, deben trabajar responsablemente para que la violencia no aparezca sobre la mesa. Por desgracia, aquí, la irresponsabilidad fue por demás llamativa.

Por Pablo Villarino – @PLVillarino

Foto: Agata Natale