Por la tercera fecha del Torneo Julio Humberto Grondona, Gimnasia cayó en el clásico ante Estudiantes por 3 a 1. Pablo Vegetti marcó el descuento, pero no le alcanzó al Lobo, que volvió a perder un clásico en el Estadio del Bosque.
El equipo de Pedro Antonio Troglio sufrió una caída por demás dolorosa. En un partido parejo y donde en gran parte del trámite el Lobo fue superior, predominó la jerarquía individual de Estudiantes, que con poco, se volvió a llevar una victoria de 60 y 118.
Desde el comienzo, el que tomó la iniciativa fue Gimnasia. Con el correr de los minutos, los albiazules jugaban cada vez más cerca del arco de Hilario Navarro y parecía llegar la ventaja en cualquier momento, a tal punto que Pablo Vegetti sacó una chilena fenomenal que se colaba en el ángulo superior derecho del arquero pincha, que voló de manera espectacular y la mandó al córner.
Paradógicamente, pasaron pocos minutos y desde un tiro de esquina, el que logró la apertura del marcador fue Estudiantes, con un cabezazo de Schunke dentro del área chica, cuando nunca había inquietado a Bonnin durante esos 40 minutos.
Así se irían al descanso, tras una primera etapa donde Gimnasia fue superior, pero la altura albirroja predominó en el área tripera y así el conjunto de Pellegrino se fue a los vestuarios con el 1-0 en su haber.
Arrancó el complemento y de movida, el rival dio un gran golpe: desbordó Cerutti a espaldas de Oreja, y en el área, Carrillo anticipó a los centrales triperos y sentenció a Bonnín con un tremendo zurdazo. 2-0 y cuesta arriba cuando apenas corrían 3′.
Sin embargo, el Lobo se dió vida minutos después: desde el tiro de esquina de Javier Mendoza, el centro delantero tripero, Pablo Vegetti, batió a Hilario Navarro de cabeza y marcó el descuento, para darle ilusión al triperío.
La misma, aumentaría minutos después, ya que Gimnasia estaba cada vez más cerca del empate y encima, se iría expulsado Leonardo Jara por juego brusco. El Lobo lo buscó por todos los caminos, pero la seguridad de Navarro bajo los tres palos fue determinante y ayudó de gran manera al visitante a mantener el marcador.
En el final, con el equipo albiazul jugado al empate, Antonio Medina terminó en campo propio, y cuando Cerutti escapaba, lo derribó infantilmente dentro del área. El propio delantero se hizo cargo de la pena máxima y la cambió por gol, haciendo estéril la buena estirada de Yair Bonnin y decretando el 3-1. Lo último del encuentro, fue la expulsión de Maximiliano Coronel, por doble amonestación, tras empujón a la vista de Pitana.
Así las cosas, Gimnasia volvió a caer en una nueva edición del clásico platense y registra una marca muy dolorosa: apenas una victoria en los últimos 18 encuentros ante Estudiantes.
SÍNTESIS
Por Manuel Surasky – @ManuSurasky