El volante que llegó desde San Lorenzo fue la figura del equipo tripero. En un partido chato, igualmente hubo rendimientos parejos. Miranda y Melluso completan el podio. Aprobado Colazo.
Si bien el trámite del partido de ayer ante Central, que terminó con victoria tripera 1-0, no destacó por ser muy lúcido, hubo algunos futbolistas que lograron destacarse por encima de la media, a base de buenas intervenciones y, generalmente, de mucho despliegue. Es el caso del mediocampista central, que al igual que en el partido ante Racing, demostró con un par de fundamentos, que ya es una fija dentro del equipo titular.
El formoseño fue lo mejor de un primer tiempo discreto, aportando tanto en ataque como en defensa. En ofensiva, se hizo cargo de la pelota y fue el volante que se desprendió para tratar de generarle juego a Contin, y participó con varios pases entre líneas que fueron determinantes. En materia defensiva, fue el primero en liderar la presión y sacrificarse para quitar la pelota al rival. Siempre bien perfilado para jugar y criterioso a la hora de interpretar el juego, cortó mucho y siempre se mostró a sus compañeros para poder asociarse y generar peligro.
Más allá de esto, fue otro buen partido de Matías Miranda. Aunque corrido a la banda izquierda, para ocupar los espacios, volvió a hacerse cargo de la pelota, más liberado sin extremas obligaciones defensivas. Y justamente en esta materia, también aprobó Matías Melluso, que se mostró implacable en cada cierre y en cada mano a mano, para clausurar su sector y ser siempre garantía. Buen primer tiempo de Nicolás Colazo, haciendo las veces de interno por izquierda, y correcto ingreso de Guillermo Fratta, que reemplazó a Coronel, ordenó el fondo y sacó muchísimo por la vía aérea. Sin descollar, el Lobo ganó bien en el Bosque.