Gimnasia jugó un noble partido, ante un Boca que se jugaba la chance del campeonato en La Bombonera. Pero cayó 1 a 0 a raíz de un gol de otro partido en un segundo tiempo donde venía teniendo chances concretas de gol.
Cayó Gimnasia y el Boca campeón de Miguel Russo, le cortó la racha de tres triunfos consecutivos que venía arrastrando.
Los dirigidos por Diego Maradona sabían de entrada que la parada era brava, enfrente estab Boca, en La Bombonera y con la motivación de que el triunfo le daría la victoria. Así las cosas el Lobo se plantó firme en el primer tiempo.
Con un Fatura Broun inquebrantable, y una saga de centrales (Goltz – Coronel) impasable para la ofensiva Xeneize. Hacían que Gimnasia jugase un partido, defensivamente impecable. El local tuvo sus chances de gol, pero el Mens Sana se ponía firme y sostenía la paridad.
En el complemento cambió la ecuación. El Lobo aprovechó la prisa y la desesperación de Boca, que sabía que River igualaba en Tucumán, y tenía que buscar los tres puntos a como de lugar. Fue así que Gimnasia encontró espacios, lo tuvo con un remate del Tanque Contín que Esteban Andrada sacó a puro reflejos al corner, volvió a avisar con un remate de Maximiliano Caire y la desesperación en el Estadio Alberto J. Armando.
Hasta que al minuto 27 del complemento Carlos Tevez terminó con la ilusión del Lobo, con un zapatazo que significó la derrota y el título para el Xeneize. Automáticamente contestó el equipo de Diego, y tras un gran centro de Licht, Jonathan Agudelo metió un cabezazo que pasó rozando el palo derecho de Andrada.
Fue derrota final en la Bombonera, pero Gimnasia dejó una imagen notable. Tiene motivos y de sobra para ilusionarse con las doce fechas de la Copa de la Superliga y así mantener la categoría.