El defensor marcador central izquierdo fue la figura de Gimnasia y se afianza partido a partido, a punto tal que probablemente sea el jugador más parejo del Lobo en lo que va de la Superliga. Llegó en silencio y hasta generando dudas que hoy ya están totalmente disipadas por su buen rendimiento.
Otro muy buen partido de Gonzalo Piovi, y van. El defensor zurdo fue el punto más alto de Gimnasia en el empate ante Rosario Central y se afianza partido a partido como un equipista clave para el andamiaje tripero.
Llegó en silencio, generó alguna duda y todo interrogante ya quedó en el pasado. Piovi, a pleno tiempo tal como lo caracteriza su juego, se ha transformado en un bastión fundamental para el Lobo y en la tarde de hoy frente al Canalla no fue la excepción.
Maneja los tiempos de marcaje de una manera excepcional, esperando cuando hay que hacerlo y lo propio cuando es hora de anticipar, se torna impasable en el juego aéreo y además, en el pique corto es difícil superarlo. Hoy, dos delanteros de enorme talla como Zampedri y Ruben no fueron problema para Piovi, que se cansó de ganarles en todos y cada uno de los duelos de la tarde para ser entonces la figura de Gimnasia.
En otro orden, vale destacar el enorme empuje de Rinaudo, la muy buena producción de Melluso haciendo un surco en el lateral y un muy loable despliegue de Faravelli, sumando también el laborioso trabajo de Silva. En líneas generales, el Lobo redondeó un partido más que correcto, cuestión por la que no es casualidad que haya merecido quedarse con el triunfo.