Gimnasia fue peor que híbrido y cayó sin atenuantes por 3 a 0 frente a Godoy Cruz. El Lobo volvió a defender muy mal y careció de actitud durante los 90 minutos.
El Lobo sufrió una categórica y justa derrota en Mendoza. Los dirigidos por Soso no hicieron nada bien y la caída por 3-0 fue justa y hasta podría haber sido mayor.
De principio a fin Godoy Cruz superó a Gimnasia y desnudó todas sus falencias, con más que errores, horrores defensivos, tanto en la marca como en la salida.
Fue así como a los 5′ el Tomba abrió el marcador tras un desborde de Garro que terminó en la concreción de Licht en propia puerta. Con la desventaja, el Lobo amagó con despertar, pero sólo fueron un par de chispazos.
Sobre los 39′, con otro error grosero en la salida, Cobos remató desde lejos y ante una débil respuesta de Martín Arias, puso el 2-0 con el que se fueron al descanso.
Una vez comenzado el complemento Soso cambió esquema y jugadores, dando signos preocupantes de desconcierto. Guanini y Ramírez ingresaron por Bolívar y Bonifacio, para pasar a jugar 4-3-3 con Rinaudo de volante central.
Sin embargo, las variantes no surgieron efecto en el Lobo que siguió dando signos alarmantes en cuanto a la actitud y el juego. En un complemento que manejó el local a gusto, sólo hubo tiempo para que a los 29′ Correa extendiera la ventaja tras dejar desairado a Guanini y definir al segundo palo.
Fue final en Mendoza, al Lobo no le salió nada, mostró una carencia de rebeldía dolorosa y sufrió una caída de las difíciles de salir. Como sea y como pueda, Gimnasia deberá levantarse y salir de este penoso comienzo, que ve al conjunto tripero en el fondo de la tabla con apenas 4 puntos y la exorbitante suma de 14 goles recibidos.