El técnico Tripero cumple 49 años y Triperomaniacos te hace una biografía de su vida.
Pedro Antonio Troglio nació un 28 de julio de 1965 en la ciudad de Luján pero pasó su infancia en Castelar. Futbolísticamente hizo inferiores en Ríver hasta debutar con 18 años en Primera División en 1983. En el Millo jugó 59 partidos y fue campeón de la Libertadores y de la Intercontinental. En un gran negocio para la Banda fue vendido al Verona de Italia en 1988 y en 1989 pasó a la Lazio.
Entre su paso por Ríver y su estadía en Europa, Troglio empezó a ser tenido en cuenta por el técnico de la Selección Argentina hasta disputar el Mundial de Italia ’90. En dicha competición debutó en el segundo partido ante la Unión Soviética donde a los 27′ de primer tiempo marcó uno de los goles para la victoria por 2 a 0.
Luego fue titular ante Rumania en el último encuentro del grupo y en Octavos en el triunfo por 1 a 0 a Brasil . En los Cuartos ingresó en el segundo tiempo ante Yugoslavia, en el pasaje a las semis, a pesar de haber errado el penal en la definición final.
En la anteúltima fecha entró en el complemento y la Argentina se clasificó a la final tras ganarle por penales a Italia por 4 a 3. Por último enfrentó a Alemania donde fue titular. A pesar de un buen partido del seleccionado, Pedro no pudo levantar la copa de mundo.
Su vida profesional continuó en Europa hasta 1991 en la Lazio y luego pasó al Áscoli. En 1994 fue transferido a Japón, al Fukuoka hasta 1997, año en que vino a vestir la azul marino y blanca para comenzar una historia de amor que hoy continúa. En Italia y Asia sumó 234 con partidos con 35 goles.
Como jugador del Lobo estuvo bajo el mando de Carlos Timoteo Griguol, otro ídolo de esta institución. Debutó el 23 de febrero de 1997 y se fue el 15 de mayo de 2002 con 124 encuentros disputados y cuatro tantos anotados. Además fue parte del plantel que salió subcampeón en 1998 y 2002.
Su último paso como futbolista fue en Villa Dálmine, donde fue campeón del Torneo Apertura de la Primera C. En 2003 se retira dentro de un campo de juego. El Club de Gimnasia y Esgrima La Plata, en junio de 2006 decidió en modo de homenaje retirar la camiseta número 21 que luego utilizó Fabián Rinaudo.
Como técnico, Peter arrancó su carrera en Godoy Cruz en 2004, hasta que en 2005 y tras la salida de Carlos Ischia se transformó en el flamante conductor de un equipo que estaba al borde del descenso. Asumió el 2 de abril de 2005 en la derrota por 2 a 0 ante Independiente. Finalmente logró salvarse de la promoción tras la victoria por 1 a 0 ante Newell’s en el Bosque con gol de Lucas Licht.
Con Navarro Montoya, Hérner, San Esteban Goux; Cabrera, Escobar, González, Licht; Lobos; Vargas y Delorte, Troglio arribó al subcampeonato del Torneo Apertura detrás de Boca y al 5º puesto en el Clausura 2006. Ese Gimnasia llegó a clasificar a la Copa Libertadores por segunda vez en su historia y fue con Pedro Antonio en el banco. Una serie de malos resultados llevaron a que el 7 de abril de 2007 deje su cargo con 77 partidos dirigidos donde ganó 36, empató 15 y perdió 26. Su salida dejó una gran tristeza porque este técnico ya había hecho historia.
Su carrera siguió en Independiente y luego en Cerro Porteño donde fue campeón del torneo paraguayo. En 2010 desembarcó en Argentinos Juniors. Mientras tanto, Gimnasia se salvó de dos promociones, perdiendo la tercera y descendiendo en 2011 al Nacional B.
Osvaldo Ingrao fue el técnico que duró pocas fechas. Tras su renuncia, el Bosque estallaba a gritos pidiendo por Pedro Antonio Troglio como el sucesor de un equipo que no tenía juego, había logrado solo malos resultados y se encontraba cerca de la zona roja.
Aquel año, asumió en su rol de técnico. En el primer año en la segunda categoría llegó a estar a tres puntos de la zona de ascenso pero el objetivo no se iba a poder lograr. Con varios refuerzos, jugadores que se quedaron, el equipo más grande de la ciudad retornó a Primera División un 28 de marzo de 2013 tras ganarle por 2 a 0 a Instituto en Córdoba con 12 mil almas triperas que coparon el Mario Alberto Kempes. Troglio así, se transformó en el técnico del ascenso.
Luego renovó su contrato, se mantuvo gran parte del plantel del Nacional B y la meta era la permanencia. Ese objetivo se cumplió y con creces. El Lobo peleó el Torneo Final hasta la última fecha y logró la clasificación a la Copa Sudamericana.
Hincha de Gimnasia, padrino del Campus, importante como jugador y técnico, apasionado por lo que hace donde ha llegado a casi desmayarse sentado en el banco de suplentes. A pesar de las deudas con el cuerpo técnico y el retraso en la llegada de los refuerzos, él ha decidido quedarse para querer salir campeón. ¡Disfrutemos que TROGLIO ES UN LOBO!
Por Cristian Barresi – @CrisBarresi