Durante la práctica de este martes, Lucas Licht sufrió un “pinchazo” y los estudios posteriores arrojaron una ruptura fibrilar que lo tendrá afuera por alrededor de tres semanas. Se perfilaba para ser titular en Liniers.
Mala pata para el Bochi en el entrenamiento matutino del martes, donde tuvo que salir por una molestia muscular que luego se confirmó con un diagnóstico por imágenes como desgarro.
Si bien la ruptura fibrilar es pequeña, la misma está y demanda de dos a tres semanas de recuperación, por lo que lógicamente Licht fue descartado para jugar el viernes con Vélez y también deberá olvidarse de los posteriores choques ante Boca y Belgrano, tal y como indica el calendario de Superliga.
Así las cosas, un dolor de cabeza para Pedro, que pierde un recambio importante y a una pieza que imaginaba como titular ante la expulsión de Lorenzo Faravelli. Ahora, y en este sentido, el DT evalúa las inclusiones de los juveniles Tifner y Cataldi.