Gimnasia visitó a Arsenal por la fecha 8 del Torneo de Reserva. El Lobo vencio 2-1 al dueño de casa y se puso a tiro de la cima.
Otra muestra de caracter en este Gimnasia de Andrés Yllana. El Chueco, quien hace unos días consiguió una victoria más que importante dirigiendo interinamente al equipo de Primera, volvió a dar el golpe en Sarandí, pero ésta vez al mando de sus dirigidos. En un encuentro parejo, donde el elenco albiazul se puso rápidamente en ventaja pero recibió el empate tras un certero disparo en un tiro libre perfectamente ejecutado, el Tripero terminó quedándose con los 3 puntos de manera agónica, consiguiendo así, una victoria que lo ubica en posición expectante de cara a la segunda mitad del Campeonato.
Una primera etapa donde, de arranque nomas, encontró a Gimnasia mejor parado en el partido, llevando peligro al arco rival. En la primera que tuvo, con un cabezazo de Kevin Ceceri, avisó. En la segunda, no perdonó. A los 6 minutos fue Jonás Ale Corvalán quien tomó la pelota en 3/4 de cancha, y con la misma pegada a su pié izquierdo, de derecha a izquierda, comenzó a encarar. Tras eludir dos rivales, e ingresando al área, definió cruzado al ras del verde césped. El Lobo se ponía en ventaja rápidamente y era superior al dueño de casa. Igualmente, en los minutos siguientes le iba a costar plasmar esa superioridad a los dirigidos por Yllana en los metros finales. Gimnasia no tenía claridad para cerrar las jugadas, y así, Arsenal iba a emparejar tanto el tramite, como el resultado.
Cuando el reloj marcaba los 32 minutos de la primera parte, el equipo del Viaducto se encontró con un tiro libre muy peligroso al borde del área tras falta de Ceceri. Gonzalo Giménez se hizo cargo de la ejecución, y con fuerte remate al palo de un muy tapado Alexis Martín Arias puso las cosas 1-1. De esta manera, el encuentro se iba igualado al descanso.
Ya en la segunda etapa las cosas fueron más cerradas. Con muy pocas ocasiones de riesgo por lado, el partido parecía no tener dueño. Pero a base de cambios propiciados por sus entrenadores, ambos equipos comenzaron a encontrar su mejor cara. El encuentro mutó, las ocasiones de gol comenzaron a aparecer. El golero albiazul fue clave para mantener al Lobo en partido a los 37 minutos, porque tras muy violento remate del recién ingresado Schmidt, fue su manotazo el que le negó el grito de gol al nunero 18 local. Gimnasia también llevaba peligro, sobretodo en los pies del siempre picante Horacio Tijanovich.
Los cambios le dieron una bocanada de aire fresco al elenco mens sana. Mas precisamente el último: Mariano Rivadeneira fue la clave del triunfo. A los 40 minutos ingresó al campo en lugar de Enzo Martínez. El flaco y habilidoso enganche se hizo cargo de la pelota. En los pocos minutos que le tocó participar, jugó e hizo jugar. Tal es así, que en el primer minuto de adicional, cuando el empate parecía una sentencia en Sarandí, fue el mismo Rivadeneira quien con una habilitación exquisita por sobre la defensa, dejó mano a mano a Erik Ramírez. El goleador albiazul con sutil toque por sobre la humanidad del arquero decretó el 2-1 que sería definitorio.
Con la destacada participación de Matías Caco Garcia, Gimnasia consiguió un importante triunfo en condición de visitante. El Lobo se perfila para dar pelea en la recta final del Campeonato, colocándose a tan sólo 3 unidades del puntero Godoy Cruz. Ahora vendrá Quilmes, para intentar dar otro paso, y para seguir prendido arriba.
SÍNTESIS:
ARSENAL (1): Rivero; Muñoz, Cataldi, Troxler; Carabajal, Navarro, Ruíz, Giménez; Kedack; Zaldívar, Coyette. DT: Roberto González.
GIMNASIA (2): Martín; Escobar, Guanini, Ceceri, García; Bolívar, Garibaldi; Martínez, Ale Corvalán, Ramírez; Tijanovich. DT: Andrés Yllana.
GOLES: PT 6′ Ale Corvalán (GIM) y 32′ Giménez (ARS); ST 45′ Ramírez (GIM).
CAMBIOS: ST 17′ Jones x Garibaldi y Contín x Ale Corvalán; 42′ Rivadeneira x Martínez (GIM).
CANCHA: Julio Humberto Grondona.