A falta de seis minutos para el final, el partido debió ser suspendido por una incontenible gresca entre jugadores de Gimnasia y Estudiantes. En segundo plano quedó el resultado final, que terminó siendo para el clásico rival por 1 a 0 con gol de Auzqui. Un verdadero papelón.
El Lobo perdió con Estudiantes en el clásico veraniego por 1 a 0, por el gol de Carlos Auzqui a los 17 minutos del primer tiempo. Pero con los minutos todo se fue tensionando, hasta que las trompadas terminaron siendo las causantes de la suspensión del encuentro.
En todo momento el partido estuvo picante, con provocaciones de uno y otro lado, con interrupciones por muestra de banderas rivales en la tribuna tripera y muchos alicientes más.
El primer papelón del partido fue la temeraria patada de Álvaro Pereira sobre Facundo Oreja, llevando su botín al cuello del defensor albiazul, que terminó inconsciente y saliendo del campo en ambulancia. Por suerte, rápidamente recuperó una estabilidad y no corre riesgo alguno.
Pero las cosas no terminaron allí, porque con Gimnasia jugado al empate, Solari se escapaba para liquidarlo, la quiso tirar por arriba de Bologna y el arquero se pudo interponer con el pecho fuera del área, pero Trucco vió brazo y echó al arquero, en una pésima decisión que terminó de tensionar a los futbolistas triperos.
Bonifacio se calzó el buzo porque no había más cambios, Estudiantes pateó el tiro libre a la barrera y salió la contra albiazul, que contaba con mayoría de jugadores para llegar al arco rival. Medina escapó del primer adversario y enfilaba un ataque nítido, pero Ascacíbar lo privó de ello con una patada terrorífica, que de milagro no causó lesión alguna en el delantero de Gimnasia.
Tras esa increíble infracción, los jugadores del Lobo increparon al volante rival, y en la típica gresca, comenzaron a volar piñas y patadas por todos lados, en una inexplicable e injustificable actitud. Trucco dio por terminado el encuentro y cuando ambos equipos se metían en la manga, Estudiantes volvió a salir al campo para festejar con su gente, en una decisión realmente papelonezca.
En el Minella hubo todo menos fútbol, un deporte que día a día refleja en la sociedad en la que nos encontramos inmersos. Seguramente habrá sanciones por doquier, y muy duras. Con seguridad, Gimnasia se quedará sin varios de sus jugadores para el inicio del torneo.