Pese a que le robaron un gol, un inmenso partido jugó el delantero albiazul, jugó y corrió por todos una vez que el equipo se quedó con uno menos. Gran actuación de Pedro Silva, Gastón Suso y Pablo De Blasis.
Gimnasia ganó un partido clave, crucial, de seis puntos y para ello mucho tuvo que ver su centro delantero, Rodrigo Castillo que pese a no marcar se corrió toda la cancha y fue el corazón del equipo conducido por Diego Flores.
Pomelo hizo un golazo de contragolpe en el segundo tiempo, pero la injusticia del VAR se lo anuló. El atacante albiazul tuvo un gran primer tiempo, pero en el complemento se encargó de ser el hilo ofensivo de un Gimnasia que sufría el jugar con uno menos. Dejó todo y así se lo reconoció la hinchada.
Pablo De Blasis con un excelso penal le dio la victoria a Gimnasia. Pero también jugó, hizo jugar a sus compañeros y a la precisión de sus pases le sumó la recuperación en el mediocampo. Fundamental para ayudar a un poco experto Facundo Di Biasi, como también para ser el socio ofensivo del Pata y defensivo del Nano Fernández en la primera mitad.
Párrafo aparte para “los del fondo”. Pedro Silva Torrejón se lleva su lugar en el podio. Sin lugar a dudas la revelación del mercado de pases, dejó la vida en cada pelota que defendió, se tiró a trabar como si cada pelota fuese la última, claro en ofensiva al pasar al ataque y aportar desborde y centro a la ofensiva Mens Sana. Muy bien.
También hay que hablar de Gastón Suso, el central no tuvo un buen inicio en el Torneo Apertura, pero de a poco se acomodó, demostró ser el caudillo que la defensa necesitaba y su solidez le da más seguridad a Leonardo Morales, otro que mejoró y mucho sus producciones para el equipo. Otro partido con valla invicta para el Lobo gracias a ellos.