Gimnasia sintió los coletazos del covid-19 y pese a unos buenos primeros minutos de juego en la primera parte, se aferró al 0 en el arco y no pudo pasar de un aburrido empate en el clásico local. Su arquero y la defensa lo mejor de un derby que quedará en el olvido.
Pasó la edición 181 del clásico platense, pasó el octavo enfrentamiento entre Gimnasia y Esudiantes por copas nacionales. Y el saldo fue un aburrido 0 a 0 que con el correr de los meses sólo tendrá la yapa de haber sido el primer enfrentamiento desde la reinauguración del estadio de 1 y 55.
Gimnasia plantó su mejor once, con la baja de último momento de Lucas Barrios que llevó a la dupla a apostar por Eric Ramírez y la velocidad cómo arma de ataque a un Estudiantes que defensivamente lo superaba en resto físico pero no en velocidad. Y así intentó el Lobo que dominó los primero 25 minutos de juego, con Weigandt encontrando surcos por la derecha, pero la más clara fue a los 9 minutos de la primera parte, pase en profundidad de Melluso, desborde clásico de Carbonero que le comió la espalda a Godoy y pudo poner el 1 a 0 pero tapó Andujar generando un rebote que segundo después Ramírez intentó empujar a red y la defensa salvó en la línea.
Un pálido cabezazo de Morales tras un corner bien ejecutado y una llegada aislada del conjunto local fueron lo único que se destacó en la primera parte.
El complemento fue del pincha. Gimnasia sintió los coletazos del post Covid-19 y quedó evidenciado que varios de sus futbolistas no llegaron con la semana de preparación estipulada para un partido tan exigente. A los 16 minutos, ingresó Pérez García a sustituir a un exhausto Matías Miranda. Estudiantes tomaba las riendas del partido, el medio no hacía pie y poco a poco las figuras de Germán Guiffrey, Matías Melluso y Rodrigo Rey se fueron acrecentando.
El partido se quebró definitivamente con la expulsión, correcta, de Harrinson Mancilla a los 29 minutos. Tuvo dos claras el pincha, pero las dilapidó, la primera por un travesaño y la otra por una gran tapada de Rey. Sin embargo en el adicional Contín se sacó a tres rivales de encima, lo cortaron con falta en la medialuna del área cuándo pudo quedar mano a mano con Andujar. Pero Pérez García continuó la jugada sacando un remata furioso que pegó en un central rival. De lo contrario pudo ser la más clara del complemento para el Lobo.
Fue final, fue un aburrido 0 a 0. Qué dejó de manifiesto qué Gimnasia aún lucha contra los coletazos del Covid-19 y que el mercado de pases fue escaso, si bien es sabido, Martini y Messera encontraron pocas variantes en el banco y por eso se aferraron a una igualdad que deja gusto a poco y aleja al Lobo de sus aspiraciones de jugar los cuartos de final del certamen.