Tropezó en Avellaneda

Fútbol Fútbol profesional

Gimnasia cayó en su visita a Independiente y sintió la falta de recambio producto de un mercado de pases escueto. Martini y Messera ya piensan en Defensa.

En un partido cerrado, dónde a ambos equipos le salió poco y nada de lo trabajado en la semana, Gimnasia cayó por 1 a 0 frente a Independiente por el gol marcado por Silvio Romero luego de un rebote en pelota parada en el segundo tiempo.

El encuentro en sí fue errático, comenzó con una fuerte presión alta por parte del local que el Lobo logró contener y así durante los primeros 15 minutos llegó a inquietar el arco defendido por el uruguayo Sosa. Carbonero, por el sector izquierdo, Alemán libre buscando pases al vacío y Weigandt desbordando por derecha eran las claves del conjunto albiazul para desbaratar los planes iniciales de Falcioni.

La mala noticia llegó a los 18, cuándo Maximiliano Coronel tuvo que salir sustituído por una molestia muscular, que indefectiblemente asoma como una lesión en el soleo. En su lugar ingresó Leonardo Morales.

La figura de Rey apareció cuando Silvio Romero buscó un centro que se podía meter en su segundo palo. El flamante arquero albiazul a puro reflejo logró desviar el tiro al corner. Luego respondió el Lobo, con Alemán primero forzando con un remate lejano a la reacción de Sosa. Luego entre Carbonero y Melluso encontraron al uruguayo en el área que mandó un centro bombeado para Ramírez, su cabezazo no fue preciso y la pelota terminó muriendo en un saque de arco.

En el cierre de la primera parte, dónde poco pasaba. El árbitro Dóvalo ignoró un penal claro a Eric Ramírez que indefectiblemente hubiese marcado la diferencia.

Ya en el complemento Gimnasia tuvo las más claras, primero con Weigandt ingresando por derecha y sacando un remate que Sosa muy atento desvió al corner. Luego con Contín que remató desde afuera del área para sorprender al golero local y la pelota pasó rozando su palo derecho.

El gol del Rojo llegó producto de una desatención en pelota parada, Insaurralde cabeceó con poca marca la pelota dio en el base del palo izquierdo defendido por Rey, nadier llegó a despejarla y Silvio Romero cambió por gol. Luego del tanto el Rojo fue quien propuso, Gimnasia parecía dormido y carente de reacción.

Sin embargo con los ingresos de Comba y Barrios (principalmente este último) los dirigidos por Martini y Messera se hicieron cargo de la pelota y fueron quienes propusieron. Carbonero tuvo la más clara, sacó un remate que pasó entre las piernas de Sosa, la pelota pegó en el palo y terminó atenazada por el arquero. La suerte que tuvo el local, fue esquiva para Gimnasia. Qué sin más remedio termió penando la primera derrota en la copa.