El Lobo consiguió un pálido empate

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En la tarde-noche de ayer, Gimnasia empató 0 a 0 frente a Patronato en Paraná y dejó pasar una chance muy importante para volver a los primeros puestos de la Zona 6.

Con el objetivo de ganar y volver a los puestos de Zona Campeonato, Gimnasia visitó a Patronato en el Presbítero Grella donde consiguió un pálido empate y dejó la peor imagen del ciclo de este cuerpo técnico en el año que lleva. Sin juego, con imprecisiones en el ataque y sin soluciones en los cambios, el Lobo no supo aprovechar el hombre de más que tuvo por más de una hora y ahora a pesar de que depende de sí mismo, deberá conseguir la mayor cantidad de puntos posibles.

Con un comienzo prometedor tras dos llegadas en los primeros minutos, una buena diagonal de Carbonero y un pase en cortada de Ramírez lo dejó mano a mano al colombiano que esquivó a Sappa pero la pelota dio en el palo y a la brevedad, la Perla no pudo conectar bien un centro desde la izquierda y se fue por arriba. A los 31 minutos llegó un cambio trascendental en el partido y fue la justa expulsión de Marín que dejaba al local con un hombre menos quedando una hora de partido.

Lo cierto es que el Tripero no supo encontrar los caminos en esos quince minutos y lo mismo sucedió en el segundo tiempo donde por momentos no parecía que el Patrón tenía un jugador menos en el campo y con solo cerrarse y hacer una pequeña presión desestabilizaba cualquier intención de ataque para el visitante. En la mitad del complemento, Méndez movió el banco con los ingresos de Barrios y Pérez García por Paradela y Mancilla pero los cambios no modificaron absolutamente nada y los dos jugadores mostraron un bajo rendimiento.

Sin precisión, sin un cambio de ritmo por los habilidosos del plantel y un mal campo de juego hicieron que el partido se juegue a lo que hizo el Santo, quien tuvo en los pies de Rivero la oportunidad de ganar pero insolitamente el defensor se trastabilló y Morales llegó de manera inesperada para barrer y salvar el arco de Gimnasia y conseguir el punto que podría valer mucho dentro de dos semanas.

A pesar de tener tres cambios y dos parates más, el cuerpo técnico no creyó necesario utilizarlos hasta los 91 cuando entró Contín por Morales pero solo un desborde de Carbonero quien tiró un centro y nadie llegó fue lo más inquietante que tuvo el albiazul en los últimos minutos.

Así dejó pasar una buena chance de ganarle a uno de los equipos más flojos del torneo jugando un flojo partido aunque saben que consiguiendo la mayor cantidad de puntos y consiguiendo la clasificación, este encuentro solo puede ser un mal trago que no el cuerpo técnico no querrá volver a tomar ya que el torneo lo comenzó de gran manera pero algunos momentos del partido con Huracán y los 90 minutos de ayer no fueron buenos.