Gustó y aulló

Fútbol Fútbol profesional

Gimnasia redondeó una gran producción y venció con justicia a Independiente. Fue por 1-0, con un precioso gol de Lorenzo Faravelli. El Lobo fue superior de principio a fin y ahora, toma aire en el cierre del torneo. Se viene el clásico…
El Lobo volvió a la victoria y la valía de la misma aumenta por las formas. Superó al Rojo del 0 al 90, hizo un trabajo bárbaro desde el orden y luego, el progreso. El 1-0 terminó quedándole corto al tanteador porque el trámite fue todo albiazul.

El primer tiempo terminaría en pardas, en un resultado parcial cuasi inexplicable por la amplia superioridad tripera por sobre el combinado visitante. El equipo de Ortíz generó innumerables situaciones de gol, pero se topó con Campaña y a veces, su propia ineficacia.

El complemento siguió su curso con un trámite idéntico, pero Gimnasia pudo romper el cero. A los 6′, Hurtado pivoteó, giró y remató, la pelota dio en un defensor pero el balón quedó en los pies de Faravelli, que abrió su pié derecho y con un remate excelso la puso al lado del palo para poner el 1-0 que sería definitivo.

Desde un siempre revulsivo Vargas, el Lobo siguió siendo el más incisivo y quien mereció por ello algún tanto más que no llegaría. Sin embargo, desde un gran orden y firmeza defensiva, casi no sufrió y sólo se defendió de centros inexactos de un pálido y disminuído Independiente. Fue final, Abal pitó y explotó el pueblo tripero, al grito de desahogo y luego, claro, el deseo de lo que vendrá: “El domingo, cueste lo que cueste”. Lo cierto y concreto, es que Gimnasia toma un enorme aire y ve el futuro inmediato con otra cara.