Inexplicablemente, Gimnasia empató 2 a 2 en su visita a Arsenal. Lo ganaba 2 a 0 con doblete de Ibáñez, pero se durmió en el final y se lo igualaron.
Gimnasia tenía todo para ganar, pero se planchó en el final y terminó perdiendo dos puntos clave en la previa del clásico frente a Estudiantes.
Ya desde el comienzo, el Lobo pegó primero y explotando el balón parado a la perfección, logró una ventaja importante. Fue a los 11′ cuando Gimnasia abrió el marcador, tras un córner impulsado por Licht que cabeceó notablemente Ibáñez, confirmando la confianza aportada por Alfaro.
Pese a algunas desatenciones defensivas, el equipo tripero siguió siendo superior y muy claro en ataque. Tal es así, que sobre los 24′ y nuevamente desde la vía de la pelota parada, Ibáñez se encontró con la pelota en el aire, superó a su marcador en las alturas y cabeceó a la red, aprovechando al máximo la salida en falso de Pellegrino.
Luego de la ventaja de dos tantos, el Lobo se paró decididamente de contra y terminó sufriendo un par de embates del local, disipados por providenciales atajadas del siempre importante Martín Arias.
Ya en el complemento, Gimnasia se paró decididamente de contra, con la idea de contener el ataque rival y salir rápido para definir el partido.
Pero la apuesta salió. La defensa albiazul no se acomodó de los desacoples de la primera parte y el Lobo terminó de la peor manera. De hecho, casi no tuvo ocasiones de contragolpe, salvo con el ingresado Vegetti con un bombazo al travesaño.
Así fue como también por la vía del balón parado, Arsenal llegó al descuento. Boghossian se elevó en el área chica y logró el 1-2.
Y sobre la hora, con el local jugando con un hombre menos, llegó el insólito empate. Tras un córner que Martín Arias rechazó con los puños, capturó un rebote inexplicablemente sólo y fusiló el arco tripero. Fue 2 a 2 y Gimnasia termina sufriendo un golpe inesperado de cara al clásico.